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¡Ah... qué dulces momentos se vivieron hoy! Es algo perfectamente normal, podría decirse, y para ello cada quién pone sus razones (todas igual de válidas), pero es vergonzoso. Fueron minutos tensionantes y desperdiciados. Mucha gente mostró su peor lado y se enconaron algunas antipatías.

La reseña y exposición de hechos:

El maestro Arzave terminó por fin con el tema de los carbohidratos en la mañana y sin detenerse comenzó a dar el de los aminoácidos, dejando a muchos apantallados y con una sensación de flojera infinita, porque su frase de inicio fue más o menos: "no se preocupen, el tema de aminoácidos no se compara con el de los carbohidratos, porque en este último se tienen que aprender las estructuras de algunos azúcares, pero en el otro nomás son como... 200 aminoácidos".

Después de terminada sus horas de clase, anunció que nos daba la libertad de elegir la fecha para el examen acerca de todo el tema de carbohidratos y... se lavó las manos y salió del salón. No sé si hubiera sido mejor que él mismo nos impusiera las fechas o si eso lo hizo a propósito, porque entonces el salón se convirtió en una especie de... selva.

¿Hubo una votación? Pues sí, la hubo. Y se decidió (democráticamente, a pesar del escándalo que se escuchaba al estar todos exponiendo su punto de vista... a gritos) que el examen fuera el viernes 5 de octubre. ¡Pero pronto hubo un cambio de opinión! Y es que empezaron a circular rumores acerca de que Arzave dijo que si terminaba aminoácidos esa semana, entonces iba a poner carbohidratos y aminoácidos en un mismo examen.

Se escucharon entonces, distinguiéndose sólo como voces impersonales entre el ruidazo que había en el salón, expresiones como: "de todas maneras nadie va estudiar, no importa qué día", "para el viernes se nos va a olvidar todo", "¡se nos va a juntar todo para el viernes!". Hasta que por fin, quién sabe cómo, un orden espontáneo invadió al salón y, por votación, se decidió que sería el martes.

Entonces comienza lo peor.

Jany e Ingrid fueron de un lugar a otro poniendo todo en orden y verificando todo lo relacionado con la logística que implica un examen. Pero todos ya estaban muy acalorados y muchos no quedaron conformes con la decisión, y no se hicieron esperar los comentarios y los resentimientos (poco razonables y propios de la actitud de algún niño chiflado). Se tornaron muy sensibles los límites entre cada uno y el respeto ya casi no existía.

Le dicen en escolar a Jany y a Ingrid que no hay ningún salón disponible para el martes, y por eso deciden que sea el miércoles. Habiendo arreglado todo, nos avisan que el examen será el miércoles. Pero para entonces la inconformidad todavía no se disipaba, y menos aún porque la mayoría había votado por que el examen fuera el martes. Así que Érika, en todo su derecho, y sobre todo tomando en cuenta los comentarios que había escuchado por parte de los que no estaban de acuerdo con que el examen fuera el martes, fue a preguntar a escolar si no había algún salón libre ese día. Y le dijeron que sí había.

¿Qué pasa entonces? ¿quién mentía? ¿la representante o los de escolar?: esa fue la duda que invadió a todos, y ahora, los que apoyaban que fuera el martes el examen defendieron su postura con mayor ahínco. Nadie cedía. Érika comentó que sí había salones disponibles el martes, siendo que Janette e Ingrid habían dicho que no. Pero las tres hablaban porque la información se las habían dado en escolar... y las tres lo aseguraban.

Así que, por alguna razón, se culpó a Jany e Ingrid de lo que sucedía y ya nadie confiaba en nadie. "¡Golpe de estado!", se escuchó de pronto, seguido de un "this-is-Sparta!". Y el desorden incrementó.

Entre los rumores se escuchaba: "Esque ellas hacen lo que quieren, no respetan las decisiones del grupo", "Ya no se puede hacer nada", "De todas maneras vamos a reprobar, hombre...". Y entonces entra la maestra de matemáticas. Contempla un momento nuestro escándalo, muy sonriente, como siempre... y de pronto se escucha la voz de Ingrid diciéndonos que la teníamos "¡hasta la madre!" y que estaba harta de que no nos pusiéramos de acuerdo. Ninguna explicación. Ninguna palabra acerca de lo que objetivamente sucedía.

¿Pero quién puede reclamárselo si de todas maneras muchos pensaron que ella y Jany mintieron? ¿quién puede decir algo si la mayoría no se pudo resistir y mostró todo el egoísmo que puedieran tener?

"Te recuerdo que ésta es la clase de matemáticas", y por un momento se olvidaron los conflictos.

Al menos eso pareció, porque lo más seguro es que permanecieran en latencia, porque a la salida, la trifulca volvió. ¡Y no se imaginan lo sofocante que fue estar en un espacio del tamaño de un pasillo! Nos informaron entonces que algunas personas habían ido a hablar, por su cuenta, con Arzave para modificar la fecha (que ya se había concertado para el martes, definitivamente) y entonces nos envolvimos en interesantes discusiones (algo más sensatas) referentes a que el grupo es muy numeroso, a que los maestros estarán en nuestra contra por que no les conviene tener un grupo así, a que probablemente nos vayan a dividir en dos grupos, a las actitudes que toma cada persona... Cuando de pronto Érik llega y nos dice: "Cambié la fecha del examen para el miércoles de tres a cinco, en el 107". Iba muy apurado, no se detuvo y nos los dijo con una natrualiad que ofuscó muchísimo a algunos de los que estaban ahí.

¡Llegó el colmo! Ahora sí, ya no se trataba de un malentendido con escolar, sino que se estaba ignorando la decisión grupal. Hubo conflictos a palabras, casi golpes. La escena era triste. ¿Es tolerable que esto suceda?

Todo quedó en que el lunes se discutiría en grupo el asunto. Pero no por eso se aliviaron las tensiones que surgieron de repente entre varios compañeros.

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OPINIÓN:

Es humillante. ¿O qué no nos decimos LBG´s? ¿no se supone que fuimos elegidos por nuestro puntaje elevado en el examen de admisión? ¿no se quedaron muchos, por nuestra culpa, con ganas de ocupar un lugar en el salón...? ¡Es tristísimo haber visto a tantos egos hirviendo de enojo esta mañana! ¡y a los gritos y los "déjenme hablar"! Actitudes como las que se vivieron hoy hacen pensar en que después de todo muchos no merecen su lugar en la LBG. Debatir es emocionante, pero dejar a un lado la razón y pasar a una discusión al estilo paty chapoy (así, con minúscula) es... triste.

De cierta manera, somos científicos ya, y por eso estamos comprometidos por completo con la verdad y la razón, ¿nos dedicaremos entonces a duelos de comadres o a hacer ciencia? ¡Ah, claro! Habrá algunos que digan que pueden hacer ciencia solos y que no necesitan colaborar en un grupo... pero, ¿es necesario refutar esto? ¿no es esa frase una contradicción por sí misma?

No estuvo bien nada de lo que sucedió hoy, y si se dan cuenta, todo tuvo origen en las actitudes que tomó cada quién, porque desde el principio, muchos se quejaron de que la fecha consensuada fuera el martes. Y claro, hay que destacar que entre las tantas malas actitudes (aunque haya sido producto de la tensión que había en el ambiente), la que tomó la suplente frente al hecho, destaca mucho: no fue la más propia que pudo haber tomado, porque a pesar de todo, recaen sobre ella responsabilidades y, por tanto, debería mantener cierta discreción cuando se trate de sus opiniones personales, en especial cuando ponen en duda la honestidad con la que se desempeña. Ésa fue la razón por la que Érika fue a preguntar lo de los salones y por la que muchos hubieran ido también. Pero esto es sólo el inicio, porque después no se respetó el acuerdo general que se logró y se suponía definitivo.

Si sólo hubiera un compañero al que se le presentaran dificultades para presentar un examen cierto día a cierta hora, entonces sería razonable obrar para ayudarle en la fecha, pues es parte del compañerismo entre nosotros. Pero no es así: son muchos los que tienen que dar su punto de vista. Y por eso se sometió a votación el asunto. ¿Se va a tomar en cuenta la voluntad y los criterios de una sola persona, ahora, que estamos en esta situación?

Creo que no debemos culpar a nadie de esto. Érik está preocupado por sus problemas de la misma manera que cada uno por los propios, así mismo, él debe considerar su error y nosotros el de juzgarlo por ello, junto con el de la actitud que tomamos a la hora de exponer nuestros puntos de vista; en especial todos los que de alguna manera estuvieron involucrados a fondo en el malentendido.

Este error ya está hecho. Al menos, como aprendizaje, ahora nostros mismos ya sabemos un poco más con qué clase de personas estamos tratando en el salón. Muchas personas sacaron lo peor de sí, y se crearon nuevos y se intensificaron viejos conflictos.

¡Pero es el punto estar peleando y discutiendo de esa manera! (llevar la contra porque sí, es divertido, pero sólo cuando se trata de los juguetes de algun preescolar o de los berrinches de alguna niñita). Por eso, creo que lo mejor será que el lunes (ya está reservado un salón para ello) todos votemos por la fecha del examen de bioquímica y también por la frecuencia en la que estaremos tomándolos. Pero, tomen en cuenta que debe ser en un ambiente de confianza y de diálogo (NO DE GRITERÍO) el que debe imperar entonces.

Así que, lo dejo a su consideración, y los que estén de acuerdo con que hagamos una nueva votación, por favor, el lunes después de clases, nos reuniremos. Si acaso no son mayoría los que se queden, es decir, los que estén a favor de las nuevas votaciones, entonces se tendrán que dejar las cosas como estaban y no se modificará ninguna fecha.

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• Martes

Pros:

1. No se traslapa mucho del contenido del tema de los aminoácidos con el de carbohidratos.
2. Tendríamos una tarde entera para terminar, sin presiones, el manual de bioquímica.
3. Acordaría con la decisión tomada antes en el grupo.

Contras:

1. El día es más cercano.
2. Implicaría ya haber estudiado antes, pues sólo hay un día de diferencia entre la decisión y el examen.
3. Implicaría cambiar una vez más la fecha, y por lo tanto, ir a hablar con el maestro Arzave y depender de su respuesta.

• Miércoles

Pros:

1. Hay más tiempo para estudiar.
2. No tendría que modificarse nada.
3. Tampoco se traslapa mucho con el contenido de aminoácidos.

Contras:

1. Implicaría estudiar con la presión de terminar el manual de bioquímica al mismo tiempo.
2. Iría en contra de la decisión que se había tomado antes.
3. Probablemente, sea el día del examen de laboratorio también, porque el mismo maestro dijo que recogería los manuales y haría una evaluación.

No son todas las razones y quizá muchas no tengan tanta importancia como otras. Una incluso es sólo una probabilidad. El propósito es que cada quién se forme su propio juicio y no permanezca indiferente.